Pues si a alguien le gusta la literatura le han de gustar de seguro las met·foras. Recuerdo cuando en el cole nos enseÒaron la palabra "met·fora" y estaba siempre relacionada con "tener los ojos como platos", que significaba "tener los ojos muy abiertos, como si fueran platos". No sÈ si esto pasa hoy en dÌa, pero Èsta de los ojos y los platos era la met·fora fundamental, y claro, a mi aquello de las met·foras me parecÌa entonces una pr·ctica de lo m·s burda y vulgar. Porque anda que no hay met·foras buenas en el mundo para enseÒar a los niÒos esa tonterÌa. Y dir·n que es porque los niÒos son medio tontos (que lo son) pero en cualquier librito de literatura infantil pueden ustedes encontrar ejemplos la mar dechulos y poÈticos; adem·s, como en la peli de FantasÌa y todo eso, las cosas dirigidas a un p˙blico infantil siempre han escondido un reverso tenebroso a mis ojos. Por lo pronto, les regalo una met·fora para nada pueril, es una de mis favoritas y se la debemos a Alejandra Pizarnick (oh Alejandra Alejandra), poeta (o poetisa) argentina y maldita, finalmente, muerta:
"Pajaros grises en el horizonte son a la ventana cerrada lo que a mis males mi poema."